Sin pensamientos. Sin
palabras. A veces es bonito no pensar en nada y simplemente ser.
No nos sucede a menudo, no siempre tenemos tiempo, con las prisas de la vida cotidiana anhelamos la calma cada vez más.
¿Sabes que los momentos de conciencia, incluso si son cortos, son muy importantes?
Permítetelos y te convertirás a ti mismo, podrás digerir los procesos y darte cuenta de dónde estás y hacia dónde quieres ir.
Déjate llevar por esos momentos sin pensar en nada, sin expectativas.
Recuerda: la quietud no significa quedarte quieto, es un momento precioso para coger fuerzas para el siguiente desafío que te espera.
No nos sucede a menudo, no siempre tenemos tiempo, con las prisas de la vida cotidiana anhelamos la calma cada vez más.
¿Sabes que los momentos de conciencia, incluso si son cortos, son muy importantes?
Permítetelos y te convertirás a ti mismo, podrás digerir los procesos y darte cuenta de dónde estás y hacia dónde quieres ir.
Déjate llevar por esos momentos sin pensar en nada, sin expectativas.
Recuerda: la quietud no significa quedarte quieto, es un momento precioso para coger fuerzas para el siguiente desafío que te espera.